Aunque las urgencias en ortodoncia son poco frecuentes, es esencial estar preparado para ellas. En este artículo, ofrecemos una guía sobre cómo manejar estas situaciones. Describimos varias urgencias ortodónticas comunes y sus tratamientos. A menudo, tanto el personal de la clínica como los pacientes pueden resolver estos problemas fácilmente. Sólo los casos más graves requieren la atención inmediata del dentista.
Urgencias leves
En ocasiones, los pacientes pueden experimentar incomodidades menores que no constituyen verdaderas urgencias ortodónticas. Por ejemplo, cuando se queda comida atrapada en el aparato, puede ser incómodo o vergonzoso pero se soluciona fácilmente con hilo dental o un cepillo interproximal.
Otra situación común es el aflojamiento o desprendimiento de las ligaduras. Si son elásticas, pueden recolocarse utilizando unas pinzas. En el caso de las ligaduras metálicas, un auxiliar puede retirarlas. Si sobresalen hacia el labio pero no están sueltas, se pueden doblar con un hisopo de algodón para evitar la irritación. Es importante revisar todas las ligaduras cuando una se suelta o se rompe, ya que otras pueden seguirle.
Molestias del paciente
Es normal que un paciente sienta molestias durante un par de días después de los ajustes con brackets o tras el cambio de alineadores. Es fundamental explicarles que este malestar es temporal y aconsejarles comer alimentos blandos, además de enjuagarse la boca con agua tibia con sal para aliviar las molestias.
A pesar de todo, la ortodoncia puede provocar ulceraciones en las mejillas, labios o en la lengua. Esto no es una urgencia en ortodoncia, pero puede ser muy incómodo. Para proporcionar alivio inmediato, se puede aplicar una pequeña cantidad de anestésico tópico directamente sobre la llaga. Si el paciente lleva brackets, se le puede irritar la boca, especialmente cuando está comiendo. Un poco de cera puede reducir el roce del metal. Simplemente pellizca un pedacito y haz una bola del tamaño de un guisante. Aplánala y colócala sobre el área de los brackets que causa irritación. Los pacientes podrán comer más cómodamente. Si la llaga sale por un alineador, coloca la cera en el borde del plástico que está rozando. Es importante avisar siempre de que la cera es inofensiva y que si accidentalmente se ingiere no hay ningún problema.
En otras ocasiones, el extremo del arco puede salirse de su lugar y provocar heridas en la boca del paciente. En estos casos, intenta empujar el arco para que quede plano contra el diente. Si el alambre no puede moverse a una posición cómoda, cúbrelo con cera. Si decides cortarlo, utiliza un alicate adecuado y evita que el paciente se lo trague colocando una gasa alrededor del área.
Aprende más sobre el cementado y ligado de brackets en el modulo 2 de nuestro Postgrado en ortodoncia.
Brackets flojos
Cuando los brackets se aflojan, es crucial que el paciente se comunique de inmediato con el ortodoncista para recibir instrucciones específicas. Los brackets pueden desprenderse al consumir alimentos duros o debido a algún tipo de trauma. Recomendamos encarecidamente a todos los pacientes, especialmente a aquellos con brackets, que utilicen un protector bucal durante la práctica de deportes.
Aunque no es común, la ingesta accidental de una pieza del aparato ortodóntico puede ser alarmante. Es importante mantener la calma y tranquilizar al paciente. Si el paciente presenta tos excesiva o dificultad para respirar, la pieza podría haber sido aspirada. Si la pieza es visible y se puede retirar con seguridad, debe hacerse con cuidado. En caso contrario, es fundamental notificarlo inmediatamente al doctor. Además, es importante examinar los brackets para identificar posibles problemas derivados de la pieza faltante, como aflojamiento o irritación, y actuar según las indicaciones anteriores.
Ataches sueltos
Si el paciente pierde un atache, pídele que siga usando su alineador hasta que acuda a la consulta, ya que la eficacia de ortodoncia invisible requiere llevar la aparatología en boca el mayor tiempo posible. Además de la caída de un atache, otra situación habitual es que se rompa un alineador. En función del estado del tratamiento y la evolución del caso, deberás valorar si reemplazarlo por otro igual o si pasar directamente al siguiente.
Si el paciente ha perdido uno de sus alineadores tendrás que pedir otro de sustitución. Es importante actuar con rapidez ya que no debe interrumpirse el tratamiento.
Tanto tú como tu personal podéis aprender más sobre cómo actuar en cada situación participando en los diferentes cursos de ortodoncia que ofrece POS.